lunes, octubre 31, 2005

Indice al 31 de Octubre de 2005

Agosto de 2005
El Portero del Prostíbulo
Encuesta mundial
Para pensar
El carpintero
Resultado
Prueba
Súplica.
Los dátiles
Moses Mendelssohn, el abuelo del músico
Celos

Setiembre de 2005
Un tropiezo... por Mamerto Menapac
Sin educación, el futuro está en riesgo
PRESIDENTE POR UN DÍA
EL SILENCIO INTERIOR
Los anteojos de Dios por Mamerto Menapace,
Seducir a los musulmanes
Un gran sabio samurai
Los chistes de Adrián
Adrián, Laura y Verónica se baten a truelo
Curso para el sexo masculino: adaptación al medio
Historia de Srinivasa Ramanujan
Importancia de la puntualidad
Lo mejor está por venir
El cristal con que se mira
Compartir una historia
Te agradecemos Señor
Día del maestro
Método rápido y práctico para achicar la soberbia
Charles Darwin: un comentario sobre la Argentina
Todo según el cristal
Error de cálculo
Parece muy obvio
La cigarra y la hormiga
Maestro, háblanos de los argentinos
Si el mundo fuera una villa de 100 personas
¿Podemos vivir más despacio?
Paracaídas
Punto de vista
Evolución de la educación primaria
Silencio
Abuelo
Acto de amor
Compartir tu maíz
Retrato de una muerte anunciada
Los niños aprenden lo que viven
Más que un anillo de compromiso
Como el lápiz
Hasta que duela de la Madre Teresa de Calcuta
Recobran vigor en el país las logias masónicas
El diario de un perro
Frases de Nietzsche
Cuenta una antigua leyenda noruega
Zanahoria, huevo o café
¿Cuándo es de día?
Una historia que se debe conocer
Déjame que te cuente
La oración de Santa Teresa
La delgada línea roja
Para ti, ¿qué es la riqueza?
El cielo nos mira… y el Tío Sam también
El ruido de la carreta
Dulce despertar
El problema
Para leerlo… ¿Existe Dios?
Estudiante: Queridos papá y mamá
El árbol de los problemas
¿Qué es lo más importante que has hecho en tu vida?
El ladrillazo
Un hombre de ley
Consejo chino
Promoción
Heridas que duelen
Para reflexionar sobre el idioma castellano
La historia del burro
¿Por qué grita la gente?
Te deseo lo suficiente
La mentira descubierta
Definición de amor
La pesca milagrosa
Cuento para personas inteligentes
El analfabeto político

Octubre de 2005

Si el mundo fuera una villa de 100 personas
El misterio argentino
Todos ganan: el aprendizaje al servicio del prójimo
Método para estimar el número de peces que hay en lago
El peligro de las drogas sintéticas
Indultos: ¿justicia o venganza?
La silla
Las patentes de los autos y el "entrenamiento" matemático
Peligra el financiamiento de las bibliotecas populares...
El bolígrafo millonario, la miopía de la NASA
Los tres deseos de Mamerto Menapace
Los enigmas del preservativo...
La ciudad desde el aire
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La escasez de sacerdotes…
Pobreza e inflación ¿dos cosas aisladas?
Solidaridad sin segundas intenciones
Fenómenos no naturales
Divorciados vueltos a casar y comunión
Entre el cielo y la tierra: la extraordinaria ruta de la fe
Cohabitación: una buena receta para la ruina matrimonial
Mamá
La indecisión
Para qué crear
La medida de la felicidad
¿Cuántos infinitos hay?
La estatua del Buda
La computadora como lápiz
¿Qué es ser pobre?
Juan Bautista Alberdi
La gran invocación
Voluntarios para niños en peligro
Hay que tomar en serio a los científicos
Oración para mis amigas
Los hijos del divorcio
Compartir lo provisorio
Domingo F. Sarmiento
Los cuatro colores de los mapas…
Educación, ayer, hoy y siempre
Hada madrina en otro formato
Eligiendo cruces
Pensar en el futuro
Martín Varsavsky en una nueva aventura
La Argentina comprará un millón de laptops
Ciudades Wi-Fi
¿Pegarles a los chicos? Casi nunca.

domingo, octubre 30, 2005

¿Pegarles a los chicos? Casi nunca, de Fernando Savater.

FILOSOFO, UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID

La más impresionante y modélica hazaña educativa que conozco empieza con un buen cachete dado en su preciso y precioso momento. La joven Ana Sullivan llega a casa de Helen Keller, ciega y sorda (en apariencia también muda a sus siete años), para afrontar una tarea imposible, la instrucción de la niña, que ni puede ni quiere comunicarse con los demás.

En realidad, los padres de Helen no la contratan para que "eduque" a su hija —objetivo que consideran inalcanzable—, sino para que la soporte, porque ellos ya no pueden aguantar más. El primer día de su nuevo trabajo comienza como una pesadilla para Ana Sullivan. A la hora del almuerzo familiar, Helen se niega a sentarse a la mesa, tira la servilleta, arroja la comida al suelo y hostiliza a la nueva institutriz. Si la señorita Sullivan hubiera sido una simple empleada dispuesta a cobrar y no meterse en líos, Helen no se habría sentado a la mesa y habría muerto salvaje, incluso retrasada mental, como la suponían sus amorosos deudos. Pero Ana Sullivan era esa cosa heroica e insobornable: una auténtica maestra. De modo que ante el horror de los políticamente correctos padres, le soltó a la minusválida un fenomenal bofetón. Y Helen se sentó a la mesa, malcomió entre gruñidos y comenzó el arduo camino de su educación que la llevó muchos años después a poseer una envidiable cultura y a escribir un libro en el que agradecía aquel cachete valeroso de su maestra como el golpe de gracia que le salvó intelectualmente la vida.

Quede claro: no hay que maltratar a los niños ni se debe recurrir habitualmente por frustración, histeria o sadismo a los castigos corporales contra ellos. En circunstancias favorables (no digo "normales", porque lo realmente favorable rara vez es normal), los encargados de su buena crianza pueden enseñarles las pautas de convivencia a base de la persuasión y del ejemplo. Pero es importante que el niño conozca que hay límites que no se deben transgredir.

Pasada la indignación rebelde del momento, cualquier niño sano puede comprender la diferencia entre unos padres exasperados hasta el límite de su paciencia (pero dispuestos inmediatamente a perdonar y acariciar) de otros predispuestos por incapacidad o vicio a la agresión. Ninguna bofetada sustituye a la persuasión, pero alguna —en el momento adecuado— puede servir de aldabonazo para que las razones persuasivas sean mejor atendidas.

En todos los continentes, especialmente en los países del llamado Tercer Mundo, millones de niños padecen maltrato. Nunca ven acercarse a ellos a los adultos más que con malas intenciones: no para jugar o instruirles, sino para esclavizarles como trabajadores a destajo, objetos sexuales o minúsculos soldados de guerras que no pueden ni deben comprender.Es el peor de los pecados, el motivo que justificaría otra lluvia de fuego sobre nuestra civilización en tantos aspectos desalmada.

También en los países democráticos y desarrollados a menudo los más pequeños pagan en la intimidad del hogar agobios y frustraciones de quienes deberían cuidarlos. Pero no menos dañino a largo plazo es que crezcan en la falsa tolerancia de quienes no saben o no quieren enseñarles las restricciones que impone la convivencia civilizada.

Les cuento un caso vivido: sesión de tarde en un cine de estreno, en San Sebastián. Un machito de unos doce años martiriza groseramente a la niña que le acompaña, a la que entre una cosa y otra le está dando una auténtica paliza. Los adultos circunstantes miran con embarazo y comentan con desagrado, pero no mueven un dedo. Hasta que una señora joven y bien plantada se levanta y le arrea un sopapo al botarate, diciendo: "Eso, para que aprendas que siempre habrá alguien más fuerte que tú". No, claro que no se debe pegar a los críos. Casi nunca.

Copyright Clarín y Fernando Savater, 2005.
Ciudades Wi-Fi

Un número creciente de ciudades en los Estados Unidos están considerando las conexiones rápidas de internet con tecnología inalámbrica como un servicio similar al agua corriente o la luz eléctrica; pero entre más se extiende el concepto, más luchan las empresas de telecomunicaciones contra la iniciativa.

A comienzos del mes, Filadelfia anunció planes para construir el mayor sistema de internet inalámbrico en el país. La red de más de 349 kilómetros cuadrados será construida y administrada por Earthlink, y ofrecerá el servicio a residentes de bajos ingresos por cerca de 10 dólares mensuales. Por su parte, San Francisco planea anunciar pronto los resultados de la licitación que convocó a empresas para proveer un servicio inalámbrico a sus 750.000 habitantes. Una de las propuestas que provocó fuertes reacciones fue la del gigante de la internet Google, que ofreció un servicio inalámbrico de alta velocidad, gratis y financiado con pautas publicitarias. El alcalde de San Francisco Gavin Newsom dijo que, "es inevitable, hace mucho que se necesita wi-fi. Yo creo que es un derecho fundamental el tener acceso universal a la información", señaló. Wi-Fi, del inglés wireless fidelity o fidelidad inalámbrica, es un sistema por el cual los usuarios cuentan con la libertad de instalarse con sus computadores portátiles y/o mini computadoras, sin ningún cable o enchufe de por medio.

Detractores

Las compañías de telecomunicaciones que invirtieron billones de dólares en redes de cable de fibra óptica subterráneas, están orquestando campañas legislativas y de relaciones públicas para impedir las iniciativas municipales. Al momento, hay un proyecto de ley en el Congreso, apadronado por el congresista republicano Pete Sessions, que busca prohibir que las ciudades construyan redes municipales de banda ancha. Pero en el otro lado de la contienda está otra iniciativa legislativa apoyada por el también republicano John McCain y el demócrata Frank Lautenberg, que aboga por los planes de conexiones inalámbricas. Las compañías de telecomunicaciones consideran que la competencia estatal pone en desventaja a los negocios privados y que las ciudades están apresurándose al invertir en un mercado nuevo sin tener pruebas suficientes de su éxito.

Acceso rural

Según estudios recientes, desde el año 2000, Estados Unidos pasó de ser el tercer país con mayor acceso a la internet de banda ancha per capita, al decimosexto. Hogares con ingresos altos tienden a contar con el servicio rápido, mientras que sólo el 38% de familias con ingresos bajos cuentan con el servicio. Muchas zonas en el campo, fuera de las grandes ciudades, cuentan con un servicio limitado o simplemente no lo tienen. En contraste, se cree que una parte rural del estado de Oregon, es el lugar con una de las mayores redes inalámbricas del mundo. Los 1.554 kilómetros cuadrados de conectividad inalámbrica ofrecen cobertura de internet, rápida y gratis, a centros educativos, servicios de emergencia y residentes.

Perú wi-hi

La experiencia tampoco es nueva en Sudamérica. Una red de centros de computadores comunitarios conectados con la tecnología inalámbrica se puso en marcha en Perú a finales del año anterior. El plan piloto se lanzó en el Valle de Huaral a 80 kilómetros de la capital, Lima, y tiene como objetivo ayudar principalmente a agricultores pobres de la región. A través de la red, cerca de seis mil personas pueden acceder a información sobre precios de productos agrarios en el mercado y sus tendencias.

El Proyecto de Información Agrícola para Agricultores del Valle de Chancay-Huaral también provee vínculos entre organizaciones locales a cargo de la irrigación de agua, que les permite coordinar sus acciones.

Redacción BBC Link corto: http://www.lanacion.com.ar/750400
La Argentina comprará un millón de laptops de 100 dólares en 2007

El ministro de Educación Daniel Filmus anunció que el país se sumará al proyecto impulsado por el gurú de la tecnología Nicholas Negroponte y adquirirá computadoras portátiles para un millón de alumnos de "lugares necesitados”

yN) El ministro de Educación Daniel Filmus anunció que la Argentina adquirirá un millón de computadoras portátiles a 100 dólares cada una para un millón de alumnos de "lugares necesitados del país", en el marco de un proyecto del director del Instituto Tecnológico de Massachussetts (MIT) Nicholas Negroponte. Negroponte, gurú de la informática y fundador del proyecto OLPC (Una laptop por niño, en inglés) fue invitado por el Ministerio de Educación y explicó a Filmus y a un reducido auditorio en el Palacio Pizzurno su iniciativa para la fabricación de computadoras a bajo costo para escolares, al que ya adhirieron China y Brasil.

El director del MIT presentará el 16 de noviembre próximo un prototipo de máquina cuyo costo será solo de 100 dólares y en enero y febrero próximo comenzará la venta a los países. "Argentina tiene la firme de decisión de integrarse al programa y avanzar en la fabricación de entre 500 y un millón de laptops, y convertirse en el primer país de habla española que construirá laptops a un costo de 100 dólares para que sean de los estudiantes", aseguró el ministro.

"Una laptop por niño", impulsado por el MIT, tiene como objetivo construir máquinas portátiles baratas gracias a una reducción drástica en el costo de la pantalla, una eliminación de todo el software superfluo que abarrota las máquinas actuales y fundamentalmente a través de una venta masiva a los gobiernos. El experto, quien además trabaja para la empresa Motorola reseñó que la gente lo conoce "desde hace más de 30 años", desde Media Lab, donde "utilizamos las computadoras como herramientas para el aprendizaje de los chicos".

En una serie de fotografías mostró que en 1968 "estábamos utilizando en Senegal, Africa, computadoras en las escuelas primarias pobres" y destacó que el país que más utilizó la informática para la educación es Costa Rica, donde "el 25 por ciento de las exportaciones provienen de circuitos para computación más que el café y bananas".

Sostuvo que en el tema informático "los cambios son permanentes" pero lo que persiste son las "laptops (computadoras portátiles), ya que dijo "no tienen problemas de conectividad" y "permiten bajar los costos". "Estamos discutiendo con el ministerio de Educación de Argentina que el precio inicial de las computadoras flote de entre 115 a 100 dólares y luego que comience a bajar, cuando por la producción en escala y los ahorros, a unos 90-80 dólares", dijo.

Negroponte recordó que en Camboya, a fines del 2000, construyó dos escuelas rurales, "cuando el dinero salía de los árboles", en un lugar donde no había caminos, y que colocaron una "conexión satelital" y enviaron "60 laptops, una para cada chico". "Al primer día los chicos no las abrieron en sus casas, porque que ellos tenían miedo de romperlas; sus padres estaban extasiados porque las laptops eran la fuente de luz más fuerte de la casa", continuó. Pero lo que destacó que es que "las computadoras eran de los chicos y luego se dieron cuenta que podían levantarlas, limpiarlas y usarlas, hasta que tenían unos chips que permitían su autorreparación".
Yo tengo un sueño: una notebook de 100 dólares

El gurú de la tecnología Nicholas Negroponte ajusta los últimos detalles para el desembarco de las computadoras portátiles de bajo costo, destinadas a promover la educación de los chicos en los países en vías de desarrollo

"Esto es lo más importante que hice en mi vida", dijo el gurú de la tecnología Nicholas Negroponte cuando se le consultó sobre la marcha del proyecto de crear computadoras portátiles de 100 dólares, que impulsa el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) . En enero pasado, en ocasión de celebrarse en Suiza un nuevo encuentro del Foro Económico Mundial, Negroponte daba a conocer su iniciativa de crear computadoras de bajo costo para promover la educación de los chicos en los países en vías de desarrollo.

La idea del cofundador del MIT y del grupo "One Laptop per Child" (una laptop por chico) es que los respectivos gobiernos paguen unos 100 dólares por cada computadora y las distribuyan gratuitamente entre los niños. Brasil, China, Tailandia, Egipto y Sudáfrica son algunos de los países que mostraron su apoyo al proyecto y donde se espera distribuir cerca de quince millones de unidades. Argentina también mostró su adhesión a esta iniciativa desarrollada por el MIT.

Según el ministro de Educación Daniel Filmus, el Gobierno compraría 500 mil de estos equipos para distribuir entre las escuelas. Negroponte espera tener las primeras computadoras disponibles hacia finales de 2006 o comienzos de 2007. Además, estima que en el primer año se fabricarán entre cinco y quince millones de equipos, con el objetivo de alcanzar los 200 millones de unidades anuales en 2008.

Lo justo y necesario

Aunque recién en noviembre de este año se podrá ver un prototipo, Negroponte dio a conocer algunos detalles de lo que será esta laptop de 100 dólares que, según su creador, será “duradera y flexible”. Las computadoras, que llevarán una funda de goma y podrán doblarse de diferentes maneras, estarán equipadas con un procesador de 500 Mhz, 1GB de memoria RAM, cuatro puestos USB y una pantalla que podrá utilizarse en color o blanco y negro. Tendrán soporte WiFi y permitirán compartir la misma conexión de Internet con otros equipos. Podrán funcionar enchufadas a la corriente eléctrica, con baterías recargables o también con un mecanismo similar a una manivela para que el equipo funcione en aquellas áreas donde no hay electricidad. Para reducir los costos, estas notebooks correrán bajo el sistema operativo Linux. "El software (Windows) ocupa demasiado y no es fiable, así que comenzamos con Linux", dijo Negroponte. Por el momento, son cinco las compañías que se encuentran trabajando con el MIT en el desarrollo de los primeros prototipos. Ellas son: Google, AMD, News Corporation, Red Hat y BrightStar.

Link corto: http://www.lanacion.com.ar/750705

sábado, octubre 29, 2005

Martín Varsavsky en una nueva aventura: crear un país Wi-Fi

En una entrevista exclusiva con LA NACION LINE, el empresario argentino radicado en España habla del proyecto FON, una red de conectividad inalámbrica a Internet con la que busca desbancar a las compañías de teléfonos móviles

A Martín Varsavsky le gustan las apuestas fuertes y novedosas. En 2000 donó 11 millones de dólares para crear el portal educativo Educ.ar . Hoy está a punto de lanzar FON en España, a la que califica como "una revolución". Se trata de una red que busca extender los puntos de acceso inalámbrico a Internet a partir de los usuarios que quieran compartir su conexión. Cuando una persona contrata un servicio de banda ancha inalámbrica (Wi-Fi) sólo puede usarla en un lugar fijo, su casa o su oficina. La idea de FON es simple: se trata de que cada usuario comparta una porción de ancho de banda de su conexión Wi-Fi y que, como retribución, obtenga acceso Wi-Fi en cualquier parte del país.

Sin embargo, la apuesta de fondo de Varsavsky no es sólo brindar conexión a Internet en todos los puntos, sino competir con las compañías de telefonía celular. Desde su casa de Madrid, el empresario respondió las preguntas de LA NACION LINE : - El proyecto FON se presenta como “una revolución” y el diseño de su campaña de promoción utiliza una iconografía con imágenes de manifestaciones sociales en las que se puede leer la palabra “socialismo”. ¿Es para tanto? - En FON hay tres personajes: los “linus”, que son los que comparten la red, los socialistas; los “bills”, que son los capitalistas que lucran con la red; y los gringos, que son los de afuera, los que pagan por usar la red porque no la hicieron, los turistas. Pero, claro, nos faltan los peronistas. Pero como FON no está diseñado para la Argentina y como no tengo nada claro qué actitud tienen los peronistas, éstos no son personajes en la red FON. Así que FON es una revolución capitalista para los “bills” y socialista para los “linus”. Curiosamente los “bills” y los “linus” la hacen juntos ya que los dos son “foneros”.

El proyecto FON -que se incia en España el 7 de noviembre- denomina "foneros" a los que participan del proyecto, que se dividen en "linus", "bills" y "gringos"
- La tecnología Wi-Fi funciona con la utilización de un espectro de espacio radioeléctrico que, por el momento, está liberado. ¿Cree que los gobiernos pueden o deberían regular este espectro al igual que lo hacen con otras frecuencias? - No, por suerte no metieron la mano en este espectro, sino probablemente hubieran cometido errores tan grandes como el del 3G (el último estándar tecnológico para teléfonos móviles que permite el envío de información y voz, entre otras prestaciones), donde se perdieron 50 mil millones de euros en Europa. - Algunos proveedores de acceso a Internet como Jazztel le dieron el visto bueno, ¿Tuvo contacto con otras compañías similares? - Hablé con César Alierta, que dirige Telefónica. Para Telefónica, FON es muy bueno en su pata fija y muy malo en su pata móvil. Pero Telefónica, por lo menos, tiene una pata fija. Vodafone sólo tiene una móvil muy orientada al 3G y el Wi-Fi es altamente superior al 3G. Creo que los que más preocupados están con nosotros son los de Vodafone.

Los "linus" (referente del software libre), son los que comparten su conexión y usan la conexión de los otros sin retribución económica a cambio - Una vez que el proyecto esté en marcha, ¿cómo cree que reaccionarán las compañías de telefonía móvil y las que brindan acceso a Internet? - Las que brindan acceso a Internet creo que van a estar encantadas y van a vender mucho más ADSL o cable, ya que para ser “fonero” hay que aportar Wi-Fi a la red para poder tener Wi-Fi en otros lados.

Los de los móviles primero llorarán y luego bajarán las tarifas como hicieron Telecom y Telefónica cuando entramos con el call back en Argentina, mi invento de 1990. Esto pasó en Argentina y en todo el mundo. De alguna manera, FON es el call back de los móviles, un pequeño software que cambia todas las reglas y destapa el robo. - ¿Cuáles fueron sus fuentes de inspiración para este proyecto y cuál es su objetivo? - Romper el oligopolio existente entre Amena, Movistar y Vodafone en 3G con una nueva tecnología mucho más accesible, mejor y más barata: el Wi-Fi. Y no solo en España, tenemos muchísima gente lista para bajarse el soft en muchos países del mundo. La idea la tuve andando en bicicleta por la sierra de Madrid, donde voy frecuentemente, luego de pasarme años pensando en cómo romper el arreglo tácito que parece existir entre los operadores móviles con las absurdas tarifas de fijo a móvil y de móvil a móvil, especialmente de empresas diferentes.

Los "bills" (por Bill Gates), buscan ganar dinero, otorgarán una porción del ancho de banda de su conexión y recibirán una compensación económica

- Luego del lanzamiento de FON en España, le llegará el turno a otros países europeos. ¿Cuándo cree que podrá desarrollarse un proyecto similar en la Argentina? - Así es, lanzamos FON en España, Suecia y Francia en noviembre. Pero FON es como Skype, el que quiere se lo baja y se lo podrán bajar en Argentina. FON es un software que hace que todos los Wi-Fi empiecen a trabajar en red. Se baja en la computadora y se pasa al punto de acceso Wi-Fi. FON es para los Wi-Fi lo que los servidores son para Internet. FON ordena el caos de redes Wi-Fi con un sistema unificado de contraseñas. - Usted afirmó que “FON es un movimiento de gente harta de que le timen (le roben) con el móvil”. De hecho, parece apuntar más contra las compañías de telefonía móvil que contra las que brindan acceso, pero lo cierto es que todavía no hay teléfonos Wi-Fi que operen en esa frecuencia. ¿Cómo piensa resolver esta cuestión? - Los teléfonos Wi-Fi ya existen, salieron hace dos meses y son geniales. Un régimen de llamadas, que cuesta unos 80 euros en un móvil normal, cuesta 20 euros en un teléfono Wi-Fi. Ahora, lo malo de los Wi-Fifons (así llamamos a los teléfonos Wi-Fi) es que sólo funcionan donde hay Wi-Fi. Así que, primero FON, la red; luego los Wi-Fifons, los teléfonos.

Los "gringos" son los que eventualmente pueden usar la red, para lo cual deberán pagar. Esta compensación va para los "bills" y para FON
- En FON tienen dos categorías de usuarios: “linus” y “bills”. ¿Usted dónde se ubicaría? - Los que entran a FON son los ”foneros”. Y para ser “fonero” hay que donar ancho de banda a la red por el Wi-Fi. Hay dos clases de “foneros”: los “bills”, que lo hacen para cobrar, y los “linus”, que lo hacen para compartir. Un “bill” le saca plata a la red, pero no puede ir por su país entrando en las redes de los “linus”. Los “linus”, en cambio, no sacan plata pero se pasean por el país Wi-Fi. Yo entiendo a los “bills” y me encantan que estén en la red porque reflejan el porcentaje capitalista de la sociedad. Pero me siento más “linus” porque lo que a mi más me gusta es que haya Wi-Fi por todos lados y prefiero roaming a cobro. Pero así como el mundo necesita de “bills” y de “linus”, FON también.

El símbolo de los “bills” es el exprimidor, y el de los “linus” la manifestación. - Los que quieran “sacarle el jugo” a su conexión Wi-Fi, tal como proponen en su publicidad, ¿no corren el riesgo de cometer un delito? Porque muchos proveedores ponen en sus bases y condiciones la imposibilidad de revender el servicio… - Efectivamente, si las operadoras no se lo dejan no lo pueden hacer. Pero ahora que Jazztel se manifestó a favor, los otros operadores se suicidarían comercialmente si lo prohibieran.

FON es fantástico porque antes de su creación pagabas 40 euros y tenías Wi-Fi sólo en tu casa, y a partir de FON pagarás los mismo, 40 euros, si sos un ”linus” y tenés Wi-Fi en todo el país. Ahora, si sos “bill”, lo bueno es que pagás 40 euros, pero ganás con los gringos. Los gringos son los turistas, los que están de paso y pagan por hora.

- ¿Cree que el acceso Wi-Fi debe estar disponible como el agua potable? - Así es, creo que Wi-Fi tiene que estar disponible como el agua potable, que se paga en España. - En la Argentina es muy difícil pensar que un ejecutivo o empresario tenga un weblog, que lo actualice diariamente, que deje su mail a disposición del resto de los internautas y, muchísimo menos, que cuente el paso a paso de un proyecto nuevo. ¿Por qué cree que es así? ¿Se trata de algo cultural o es un tema personal?

- La Argentina es un país muy inestable y la gente tiene miedo. Si el país logra diez años de estabilidad la gente se va a relajar y veremos empresarios blogueros. Aclaro que lo que hago yo tampoco es nada común en España. - ¿Considera que una sociedad conectada será una mejor sociedad? - Educ.ar es un gran ejemplo. Luego de la enorme inversión que hizo el Gobierno en computadoras, el 40 % de los colegios ya se encuentra conectado y la educación mejora. Con Internet, los alumnos aprenden mejor y los profesores enseñan mejor. En salud, Internet ayuda a administrar y diseminar información médica. Lo mismo ocurre en temas legales, empresariales y en todas las áreas de la cultura. Internet es el sistema nervioso del siglo XXI.

- ¿Cómo le gustaría ser recordado en el futuro? - Como un empresario que usaba ideas revolucionarias para hacer empresas, a veces con fines de lucro como Jazztel, a veces sin fines de lucro como Educ.ar, pero todas motores de cambio. Un poco “bill”, un poco “linus” y, a veces, un poco gringo.

Más información: Weblog de Martín VarsavskySitio del proyecto FON Iván Adaime, De la redacción de LA NACION LINE iadaime@lanacion.com.ar

Link corto: http://www.lanacion.com.ar/751215

viernes, octubre 28, 2005

Pensar en el futuro, por Alieto A. Guadagni, para LA NACION

Se acaba de publicar en los Estados Unidos un informe titulado "Superando la tormenta que se avecina", preparado por la Academia Nacional de Ciencias, la Academia Nacional de Ingeniería y el Instituto de Medicina, atendiendo a un pedido del Senado de ese país. Este documento expresa: "Este comité está sumamente preocupado por el debilitamiento observado en los componentes científicos y técnicos de nuestro liderazgo económico al tiempo que muchas otras naciones están aumentando su poderío. Estamos preocupados por el futuro de los Estados Unidos".

El documento hace recomendaciones concretas, de las cuales destacamos: a) contratar anualmente 10.000 profesores de matemática y ciencias para enseñar en instituciones públicas, graduados gracias al otorgamiento de becas; b) actualizar los conocimientos de 250.000 profesores en el área de matemática y ciencias; c) incentivos para estudiantes de 12 a 18 años para que tomen cursos avanzados de matemática y ciencias, con becas de cien dólares basadas en el resultado en sus exámenes; d) ofrecer anualmente becas de investigación por US$ 500.000 cada una, a pagar en un plazo de cinco años a los 200 jóvenes investigadores más destacados; e) otorgar extensiones de visa automáticas a estudiantes extranjeros que vienen a los Estados Unidos para hacer un doctorado en ciencia, ingeniería o matemática.

Todas estas propuestas apuntan a incrementar la capacitación en las calificaciones laborales que demanda el siglo XXI. El documento afirma que sin un renovado esfuerzo "para fortalecer las bases de nuestra competitividad, es de esperar que perdamos nuestra posición privilegiada en el mundo".

Consideremos ahora nuestra situación; la transformación productiva impulsada por la globalización valoriza las dimensiones tecnológicas de la educación, ya que la insuficiencia tecnológica es un obstáculo para las inversiones orientadas a los procesos productivos con gran valor agregado y generación de empleos calificados. Hoy, las exigencias educativas son muy fuertes, y en este terreno no estamos bien para competir.

Existe un desequilibrio entre las demandas tecnológicas y la oferta de las universidades. La oferta universitaria es insuficiente y, lo que es peor, declinante en áreas esenciales para nuestro futuro, como son las carreras de ingeniería y otras ciencias vinculadas con los nuevos procesos productivos, que apenas convocan a uno de cada cuatro estudiantes.

En proporción a la población, se gradúan menos ingenieros que en Colombia, Chile, México y Brasil, para no mencionar a China, Japón, Estados Unidos, Corea y Taiwán. Se gradúan apenas cincuenta ingenieros en alimentos por año. Si en Estados Unidos ya están preocupados por su pérdida de competitividad frente a otros países, en particular los asiáticos, existen muchas más razones para que nosotros también prestemos atención a esta cuestión.

Cada mil abogados que egresan anualmente de las universidades públicas se gradúan apenas 30 matemáticos y 15 físicos. El déficit es mayor en las universidades privadas, en las que apenas se gradúan dos físicos y dos matemáticos cada mil abogados. Las universidades públicas gradúan en ciencias agropecuarias sólo la mitad de sus graduados de psicología. El déficit es mayor en las universidades privadas. En las universidades públicas los alumnos que estudian ingeniería, ciencias agropecuarias, química, física y matemática no llegan al diez por ciento del total.

En las universidades privadas esta relación cae drásticamente al 2,4 por ciento. Las universidades privadas son financiadas por sus propios alumnos, y eso, lamentablemente, las impulsa a optar por carreras "baratas", o sea sin equipos y laboratorios, ya que alcanza con un pizarrón, un borrador y tiza. Esto implica que el desequilibrio en la oferta universitaria tenga que ser corregido por la universidad pública, que es financiada por toda la población con sus impuestos.

Es positivo que el Ministerio de Educación esté hoy instrumentando programas de becas para estudios en ingeniería, biotecnología, química, veterinaria, genética, informática y microbiología. Pero se necesita además que nuestras universidades públicas asuman su responsabilidad y orienten sus prioridades teniendo en cuenta los requerimientos científicos y tecnológicos que nos plantea una época histórica en la cual no hay crecimiento sustentable sin mejora en la calidad de la educación. Es hora de vincular la universidad con las necesidades del país.
Eligiendo cruces de Mamerto Menapace, publicado en Cuentos rodados, Editorial Patria Grande

Estos también es del tiempo viejo, cuando Dios se revelaba en sueños. O al menos la gente todavía acostumbraba a soñar con Dios. Y era con Dios que nuestro caminante había estado dialogando toda aquella tarde. Tal vez sería mucho hablar de diálogo, ya que no tenía muchas ganas de escuchar sino de hablar y desahogarse.

El hombre cargaba una buena estiba de años, sin haber llegado a viejo. Sentía en sus pierna el cansancio de los caminos, luego de haber andado toda la tarde bajo la fría llovizna, con el mono al hombre y bordeando las vías del ferrocarril hacía tiempo que se había largado a linyerear, abandonando, vaya a saber por qué, su familia, su pago y sus amigos. Un poco de amargura guardaba por dentro, y la había venido rumiando despacio como para acompañar la soledad.
Finalmente llegó mojado y aterido hasta la estación del ferrocarril, solitaria a la costa de aquello que hubiera querido ser un pueblito, pero que de hecho nunca pasó de ser un conjunto de casas que actualmente se estaban despoblando. No le costó conseguir permiso para pasar la noche al reparo de uno de los grandes galpones de cinc. Allí hizo un fueguito, y en un tarro que oficiaba de ollita recalentó el estofado que le habían dado al mediodía en la estancia donde pasara la mañana. Reconfortado por dentro, preparó su cama: un trozo de plástico negro como colchón que evitaba la humedad. Encima dos o tres bolsas que llevaba en el mono, más un par de otras que encontró allí. Para taparse tenía una cobija vieja, escasa de lana y abundante en vida menuda. Como quien se espanta un peligro de enfrente, se santiguó y rezó el Bendito que le enseñara su madre.

Tal vez fuera la oración familiar la que lo hizo pensar en Dios. Y como no tenía otro a quien quejarse, se las agarró con el Todopoderosos reprochándole su mala suerte. A él tenían que tocarle todas. Pareciera que el mismo Tata Dios se las había agarrado con él, cargándole todas las cruces del mundo. Todos los demás eran felices, a pesar de no ser tan buenos y decentes como él. Tenían sus camas, su familia, su casa, sus amigos. En cambio aquí lo tenía a él, como si fuera un animal, arrinconado en un galpón, mojado por la lluvia y medio muerto de hambre y de frío. Y con estos pensamientos se quedó dormido, porque no era hombre de sufrir insomnios por incomodidades.

No tenía preocupaciones que se lo quitaran. En el sueño va y se le aparece Tata Dios, que le dice:
-Vea, amigo. Yo ya estoy cansado de que los hombres se me anden quejando siempre. Parece que nadie está conforme con lo que yo le he destinado. Así que desde ahora le dejo a cada uno que elija la cruz que tendrá que llevar. Pero que después no me vengan con quejas. La que agarren tendrán que cargarla para el resto del viaje y sin protestar. Y como usted está aquí, será el primero a quien le doy la oportunidad de seleccionar la suya, vea, acabo de recorrer el mundo retirando todas las cruces de los hombres, y las he traído a este galpón grande. Levántese y elija la que le guste.

Sorprendido el hombre, mira y ve que efectivamente el galpón estaba que hervía de cruces, de todos los tamaños, pesos y formas. Era una barbaridad de cruces las que allí había: de fierro, de madera, de plástico, y de cuanta material uno pudiera imaginarse.

Miró primero para el lado que quedaban las más chiquitas. Pero le dio vergüenza pedir una tan pequeña. El era un hombre sano y fuerte. No era justo siendo el primero quedarse con una tan chica. Buscó entonces entre las grandes, pero se desanimó enseguida, porque se dio cuenta que o le daba el hombro para tanto. Fue entonces y se decidió por una tamaño medio: ni muy grande, ni tan chica.

Pero resulta que entre éstas, las había sumamente pesadas de quebracho, y otras livianitas de cartón como para que jugaran los gurises. Le dio no sé qué elegir una de juguete, y tuvo miedo de corajear una de las pesadas. Se quedó a mitad de camino, y entre las medianas de tamaño prefirió una de peso regular.

Faltaba con todo tomar aún otra decisión. Porque no todas las cruces tenían la misma terminación. Las había lisitas y parejas, como cepilladas a mano, lustrosas por el uso. Se acomodaban perfectamente al hombro y de seguro no habrían de sacar ampollas con el roce. En cambio había otras medio brutas, fabricadas a hacha y sin cuidado, llenas de rugosidades y nudos. Al menor movimiento podrían sacar heridas. Le hubiera gustado quedarse con la mejor que vio. Pero no le pareció correcto. El era hombre de campo, acostumbrado a llevar el mono al hombro durante horas. No era cuestión ahora de hacerse el delicado. Tata Dios lo estaba mirando, y no quería hacer mala letra delante suyo. Pero tampoco andaba con ganas de hacer bravatas y llevarse una que lo lastimara toda la vida.

Se decidió por fin y tomando de las medianas de tamaño, la que era regular de peso y de terminado, se dirigió a Tata Dios diciéndole que elegía para su vida aquella cruz.
Tata Dios lo miró a los ojos, y muy en serio le preguntó si estaba seguro de que se quedaría conforme en el futuro con la elección que estaba haciendo. Que lo pensara bien, no fuera que más adelante se arrepintiera y le viniera de nuevo con quejas.

Pero el hombre se afirmó en lo hecho y garantizó que realmente lo había pensado muy bien, y que con aquella cruz no habría problemas, que era la justa para él, y que no pensaba retirar su decisión.

Tata Dios casi riéndose le dijo: -Ven, amigo. Le voy a decir una cosa. Esa cruz que usted eligió es justamente la que ha venido llevando hasta el presente. Si se fija bien, tiene sus iniciales y señas. Yo mismo se la he sacado esta noche y no me costó mucho traerla, porque ya estaba aquí. Así que de ahora en adelante cargue su cruz y sígame, y déjese de protestas, que yo sé bien lo que hago y lo que a cada uno le conviene para llegar mejor hasta mi casa.

Y en ese momento el hombre se despertó, todo adolorido del hombre derecho por haber dormido incómodo sobre el duro piso del galpón.

A veces se me ocurre pensar que si Dios nos mostrara las cruces que llevan los demás, y nos ofreciera cambiar la nuestra, cualquiera de ellas, muy pocos aceptaríamos la oferta. Nos seguiríamos quejando lo mismo, pero nos negaríamos a cambiarla. No lo haríamos, ni dormidos.

jueves, octubre 27, 2005

Hada madrina en otro formato: las escuelas rurales, en espera de milagros que, a veces, ocurren.

A Noemí Delellis de Arbetman, una carta de lectores publicada en un diario y una sugerencia de su marido, Héctor, le dieron la idea y la convicción necesaria para crear la Asociación de Padrinos de Alumnos de Escuelas Rurales (Apaer), entidad sin fines de lucro que ayuda a maestros y acompaña a chicos tanto de escuelas de adobe en selvas y montes como en otras menos aisladas, de ladrillo y cemento, pero en las que también el desamparo es una constante y las necesidades abundan. Es decir, esas escuelas en las que un lápiz negro de cinco centímetros, una goma gastada, hojas escritas de un solo lado, un libro mil veces leído y las zapatillas usadas hasta el cansancio son verdaderos tesoros para todos.

Así, en 1982, Delellis comenzó a difundir la intención de colaborar con las escuelas rurales entre familiares, conocidos y las asistentes a su gimnasio de Villa Devoto. Lo suyo fue una especie de intervención de hada madrina (pero sin magia) para chicos de muchas provincias argentinas que, en algunos casos, recorren a diario kilómetros para llegar a la escuela –a caballo, cuando el barro lo permite–, soportando desde el frío hasta temperaturas tan elevadas que adormecen el intelecto y aplacan el paso.

El propósito empezó sin objetivos desbordantes: fue reuniendo interesados en convertirse en padrinos de chicos y de escuelas, personas que juntan ropa, útiles escolares, ladrillos, cemento, más un universo de cosas que envían o llevan en los viajes de visita que realizan a los colegios, en parajes como Pampa del Infierno, en el Chaco; la escuela rancho de Monte Ovemato, Santiago del Estero, o la vivienda escuela de Olla Quebrada.

Conclusión: Noemí Delelli creó un puente entre los que quieren ayudar y los que necesitan colaboración para conseguir alfabetización de calidad para todos. Hoy, Apaer cuenta con 8000 padrinos y 300 grupos de contacto –clubes y empresas, por ejemplo– con las 500 escuelas, que representan a más de 45.000 personas.

Varita no tan mágica La asociación construyó varios establecimientos, puso en marcha un programa de huertas escolares –hasta el momento crearon 346, más 54 invernaderos–, y resolvió la carencia de agua potable y de electricidad en 121 colegios mediante la construcción de pozos; la reparación de aljibes y molinos; la provisión de bombas, grupos electrógenos y paneles solares.

Además, Apaer capacita a maestros, padres y chicos para crear microemprendimientos: ya forman parte de su historia una escuela que fabrica alpargatas, otras con hornos de ladrillo, cuatro que hacen pan y una que produce lombricompuestos. Entre los cursos que dictan, se destacan el de cultivo hidropónico, el de cría de gusanos de seda y el de música argentina. La capacitación también se realiza a distancia.

Cómo ser padrinos rurales Se puede apadrinar una escuela de diversas maneras: una es proveyendo elementos y medios para que los alumnos puedan finalizar el ciclo primario y los maestros completar su trabajo.

Pero también es posible apadrinar huertas escolares e invernaderos –que tienen como fin autoabastecer los comedores escolares y brindar una alimentación diversa y nutritiva–, entregando cercos perimetrales, herramientas y semillas.

Otra opción es auspiciar microemprendimientos productivos, como granjas, hornos de ladrillo, panaderías y colmenas. Las empresas y fundaciones pueden realizar alianzas para generar proyectos, construir y reconstruir escuelas, así como cubrir otras necesidades. Las formas de colaborar son tan infinitas como la imaginación.

Más datos, www.apaer.org.ar , apaer@fibertel.com.ar y 4788-3009/5423.

Por María Teresa Morresi de La Nación
Educación, ayer, hoy y siempre, por Enrique Belocopitow para LA NACION

Según las encuestas, uno de los problemas cruciales que afrontamos en la Argentina es el retroceso sufrido por la educación y, con ello, la pérdida de una de las herramientas fundamentales para resolver el problema de la desocupación. ¿Es la situación históricamente más dramática del rubro educativo? ¿Antes la enseñanza fue mejor? ¿Cuándo? Antes de la caída de Rosas, en 1852, más del 80% de la población de nuestro país era analfabeta. En el censo de 1869 se redujo ese valor a 71 por ciento.

En 1884 se promulgó la ley 1420, de educación común y enseñanza obligatoria, laica y gratuita, y ya en el censo de 1914 el porcentaje de analfabetismo se redujo a un 35%, a pesar del ingreso de grandes contingentes de inmigrantes analfabetos. El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informa que en 2001 nuestra tasa de analfabetismo era de sólo el 2,6 por ciento. Estos números sugerirían que nuestra educación ha progresado, pero lo que era suficiente hasta la primera década del siglo XX para la actividad laboral, para el progreso económico y cultural (saber leer y escribir) hoy es francamente insuficiente. Hoy es imprescindible poseer una educación de nivel secundario y para muchísimas actividades es imprescindible contar con saber universitario.

Los que hemos vivido nuestros, en general, excelentes secundarios de las décadas del 30 o del 40 podríamos preguntarnos si esa escuela de excelencia siempre existió en la Argentina o si fue producto de los esclarecidos patriotas, que la edificaron. Desde Rivadavia y Sarmiento hasta Juan María Gutiérrez, quien abandonó su carrera política luego de ser ministro de Relaciones Exteriores del presidente Urquiza por que veía entonces que educación, ciencia y tecnología eran las llaves del progreso y la independencia nacional. Primero se convirtió en rector de la UBA, entre 1861 y 1873, cargo de mucha menor jerarquía política. Como rector, recreó el Departamento de Ciencias Exactas en 1865, semilla primero de las facultades de Matemáticas y de Ciencias Físico Naturales, creadas en 1974 a instancias del mismo Juan María Gutiérrez, las que fusionadas dieron lugar, en 1895, a la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas, que en 1951 generaron las de Ingeniería, Arquitectura y Ciencias Exactas y Naturales.

Gutiérrez contrató profesores del exterior, con capacidad como investigadores, para ir formando un buen profesorado nativo. Del decanato, Gutiérrez pasó a la jefatura del Departamento de Escuelas, responsable de la enseñanza primaria. Algo parecido a la “degradación” de Sarmiento, que luego de dejar la presidencia de la Nación sustituyó a Gutiérrez en el mismo Departamento de Escuelas.

La buena enseñanza debía comenzar desde el principio: desde la primaria. Una idea de la opinión que primaba en la Universidad a principios del siglo XX se puede colegir con motivo del pedido que en 1901 hizo el Ministerio de Instrucción Pública a la Universidad de Buenos Aires para que hiciera el diagnóstico sobre la enseñanza “preparatoria”, como se la conocía a la actual secundaria, porque en ella debían capacitarse quienes ingresarían en la universidad. La comisión, que hizo un dictamen común para todas las facultades, informó al ministro: “La instrucción preparatoria de las facultades reclama otra cosa que elementos. Exige disciplinas mentales que fortifiquen y ensanchen el pensamiento. La noción simple que la educación primaria da importa en el terreno científico un conocimiento inútil que el tiempo desvanece. Consiste en conclusiones, en una serie de afirmaciones que nada explican, porque sin demostración no se sabe de dónde vienen, y sin desarrollo razonado no se sabe adónde van. “Demostración, desenvolvimiento, son conceptos antitéticos del de noción elemental. La instrucción que cataloga conclusiones, que afirma sobre la base de la autoridad del maestro o del libro, no es educativa, porque no enseña a pensar y porque no forma el carácter. Acostumbra a la superficialidad, a la facilidad del esfuerzo para aprender, a declinar el trabajo y la investigación. Conduce rectamente al servilismo intelectual. “La instrucción preparatoria se caracteriza, a la inversa, por la dirección que persigue. Es intensiva y no de extensión, de profundidad relativa y no de superficie. Los diferentes ramos de estudio deben, en ella, ser enseñados de manera que la verdad se desprenda de una demostración y se desenvuelva en sus aplicaciones. Sus procedimientos son los investigativos, no para descubrir, sino para exponer. Hay análisis y síntesis, deducción e inducción, expuesto todo al alumno, a quien se le dice cuál es la verdad y por qué es la verdad.

“Y así se obtiene otra cosa más grande y poderosa que el conocimiento, que el tiempo en lugar de debilitar fortificará, y es la aptitud para saber. Enseñando por qué se piensa de cierta manera, se enseña a pensar." “Por eso es que todo plan de instrucción preparatoria debe contener un curso amplio de las matemáticas, ese instrumento admirable de la educación mental en que cada proposición se desprende de un razonamiento anterior, para constituir luego el antecedente de otra proposición derivada, por procedimientos tan flexibles que el espíritu desvanece todas sus vacilaciones delante de la certidumbre absoluta." “Por eso es que ha de incluir un curso vigoroso de física, esa ciencia en que se persigue la demostración, no por el experimento aislado, mero juguete recreativo reducido a sí mismo, sino por la aplicación del cálculo, que la experiencia confirma en sus resultados y muestra al alumno cómo el hecho ratifica la conclusión que la inteligencia había inducido o deducido de una verdad ya adquirida." “Por eso es que se estudia la química con la extensión necesaria para observar los poderosos resultados que el método experimental obtiene del análisis; y la historia natural, no solamente para conocer las múltiples formas de la vida, o la materia, sino también para saber como es que ese mismo análisis y la síntesis conducen a las clasificaciones fundadas en la naturaleza íntima de las cosas y no en los simples accidentes que la observación superficial considera decisivas." “Las comisiones no han vacilado sobre la orientación que había de darse a la instrucción preparatoria. La intensiva, buscada en el grupo en que mejor se permite la aplicación de los métodos que forman la inteligencia en el período en que se desarrolla y toma un tipo definitivo, suministra alumnos de clase infinitamente más elevada por su aptitud e independencia mental." “Es de experiencia universal que cuanto más bajo es el nivel de los estudiantes, más baja el nivel intelectual de las universidades."

Los hechos lo confirman: hay crisis en la instrucción superior porque la ha habido en la secundaria burocrática y sin alma, muerta hace tiempo, que suministra alumnos sin conocimientos ni aptitudes, sin hábitos de trabajo, ni voluntad de aprender.

“La comunidad de vistas de los miembros de la comisión universitaria sobre la naturaleza de los cursos preparatorios tiene la ventaja de dar una cultura igual para todos los universitarios, cualquiera que sea la carrera que adopten, sin sacrificar a los estudios especiales parte alguna de la ilustración general." “Un plan de estudios nada dice cuando se limita a enumerar las materias que incluye. Su significado está en el grado de desarrollo que les asigna y en los métodos de exposición con que ha de dárseles vida."

“Una misma ciencia –las matemáticas, la física, la historia– puede ser enseñada de muchas maneras y su valor educativo es muy diferente, según qué se adopte una u otra, al grado de ser insignificante o capital." “Deseamos manifestar que ninguna combinación de estudios puede dar resultados por sí misma y que no hay planes, sino enseñanza. Todo consiste en los métodos y en los hombres. La cuestión de educación es, esencialmente, una cuestión de profesorado”.

Parecería que el quehacer nacional fuera una espiral donde muchos de los acontecimientos, muchos de los problemas se asemejan a los problemas anteriores. Que se asemejen no quiere decir que se igualen: las circunstancias nunca son las mismas. Se puede partir de una situación en algún aspecto similar, para construir o para destruir, para avanzar o para retroceder.

A pesar del avance en la alfabetización que se había producido desde Caseros hasta 1901, el informe de la UBA sobre la enseñanza preuniversitaria fue lapidario. ¿Qué había pasado? El conocimiento, la educación, la ciencia y la tecnología avanzan constantemente, influenciando todas las actividades humanas.

Del mismo modo, no es ya suficiente que el país hoy sólo tenga en cuenta la alfabetización de su población. Es necesario que el proceso educativo continué y se eleve constantemente. La parálisis y el retroceso son los seguros pasaportes para completar la ruina nacional. En la educación nunca se termina de avanzar. Más aún: se puede retroceder hasta condiciones infrahumanas de vida por la caída del nivel educativo.

El avance en la educación hará del país el que todos quisiéramos que fuese. El proceso se ha invertido: el nivel educativo ha ido bajando desde la segunda mitad del siglo XX, haciendo del país el que no queremos que sea. Sus efectos se ven y se verán a medida que se vayan sucediendo las generaciones de argentinos si no se revierte el retroceso educativo.

El autor, premio Konex 1997, es investigador y divulgador científico.

miércoles, octubre 26, 2005

Los cuatro colores para los mapas y el avance del conocimiento, de Adrián Pasenza

Un problema famoso, que se resolvió hace unos 25 años, aproximadamente, es el de los “cuatro colores”. Y este intríngulis representa cómo una pregunta inicial aparentemente trivial -en el sentido que uno no le encuentra una aplicación inmediata demasiado importante- deriva en una serie de conocimientos que se ramifican en diversas áreas.

Los cartógrafos de la época, trazaban mapas que pretendían colorear con una cantidad mínima de tonalidades, sin que se generaran confusiones al leerlos o interpretarlos. ¿Cuántos se necesitaban para distinguir sin problemas las provincias adyacentes? No importaba que el color se repitiera en otra unidad, siempre y cuando permitiera distinguir las provincias, regiones o países que limitan entre sí.

Una persona demostró que cinco colores eran suficientes para lograr el objetivo, independientemente del mapa.

Con el tiempo apareció otra persona, que había seguido pensando el problema y demostró que tres colores no alcanzaban para colorear con claridad un mapa. Entonces quedó la “duda” de qué pasaría con cuatro ¿se podría o no se podría?

Nuevamente, hubo gente que dedicó su vida entera a buscar esa respuesta. Investigaron e investigaron pero no pudieron demostrar ni refutar la hipótesis de los cuatro colores.

Pero en el camino, y a esto quería llegar, para poder resolver el problema que originalmente tenía que ver con los colores de un mapa, se desarrollaron muchas teorías.

En el intento de “modelar” alternativas de posibles soluciones se ramificaron las dudas, los nuevos planteos y así creció una red de investigaciones y acceso a nuevos conocimientos que poco o nada tenían que ver con la incógnita original de los colores pero ayudó a resolver otros interrogantes.

Finalmente el caso de los cuatro colores para los mapas se resolvió, mucho tiempo después, por computadora y -efectivamente- cuatro eran suficientes.

La investigación básica en ciencia es hacerse preguntas, es buscar respuestas, sin preocuparse demasiado por la utilidad inmediata de lo que pueda hallarse. El hacer preguntas en la “frontera” del conocimiento es necesario porque se convierte en un semillero de nuevas preguntas que -ni siquiera- habíamos todavía imaginado.

martes, octubre 25, 2005

Domingo Faustino Sarmiento, (1811 - 1888), Autor: Felipe Pigna

El 15 de febrero de 1811 nació en el Carrascal, uno de los barrios más pobres de la ciudad de San Juan, Domingo Faustino Sarmiento. Los primeros "maestros" de Domingo fueron su padre José Clemente Sarmiento, y su tío José Eufrasio Quiroga Sarmiento que le enseñaron a leer a los cuatro años. En 1816 ingresó a una de las llamadas "Escuelas de la Patria", fundadas por los gobiernos de la Revolución, donde tuvo como educadores a los hermanos Ignacio y José Rodríguez, estos sí maestros profesionales.

Cuando terminó la primaria su madre, Doña Paula Albarracín, quiso que estudie para sacerdote en Córdoba, pero Domingo se negó y tramitó una beca para estudiar en Buenos Aires. No la consiguió y tuvo que quedarse en San Juan donde fue testigo de las guerras civiles que asolaban la provincia. Marchó al exilio en San Francisco del Monte (San Luis) junto a su tío, José de Oro. Allí fundaron una escuela que será el primer contacto de Sarmiento con la educación.

Poco después regresó a San Juan y comenzó a trabajar en la tienda de su tía. "La Historia de Grecia la estudié de memoria, y la de Roma enseguida (...); y esto mientras vendía yerba y azúcar, y ponía mala cara a los que me venían a sacar de aquel mundo que yo había descubierto para vivir en él. Por las mañanas, después de barrida la tienda, yo estaba leyendo, y una señora pasaba para la Iglesia y volvía de ella, y sus ojos tropezaban siempre, día a día, mes a mes, con este niño inmóvil insensible a toda perturbación, sus ojos fijos sobre un libro, por lo que, meneando la cabeza, decía en su casa: "¡Este mocito no debe ser bueno! ¡Si fueran buenos los libros no los leería con tanto ahínco!"

En 1827 se produjo un hecho que marcará su vida: la invasión a San Juan de los montoneros de Facundo Quiroga. Decidió oponerse a Quiroga incorporarse al ejército unitario del General Paz con el grado de teniente participando en varias batallas. Pero Facundo parece por entonces imparable: toma San Juan y Sarmiento decidió, en 1831, exiliarse en Chile. Se empleó como maestro en una escuela de la localidad de Los Andes. Sus ideas innovadoras provocaron la preocupación del gobernador. Molesto, se mudó a Pocura y fundó su propia escuela. Allí se enamoró de una alumna con quien tendrá su primera hija, Ana Faustina.

En 1836 pudo regresar a San Juan y fundar su primer periódico, "El Zonda". Pero al gobierno sanjuanino no le cayeron nada bien las críticas de Sarmiento y decidió, como una forma de censurarlo, aplicarle al diario un impuesto exorbitante que nadie podía pagar y que provocó el cierre de la publicación en 1840. Volvió a Chile y comenzó a tener éxito como periodista y como consejero educativo de los sucesivos gobiernos.

"¿Que es pues un periódico? Una mezquina hoja de papel, llena de retazos, obra sin capítulos, sin prólogo, atestada de bagatelas del momento. Se vende una casa. Se compra un criado. Se ha perdido un perro, y otras mil frioleras, que al día siguiente a nadie interesan. ¿Qué es un periódico? Examinadlo mejor. ¿Qué más contiene?. Noticias de países desconocidos, lejanos, cuyos sucesos no pueden interesarnos. (...) Trozos de literatura, retazos de novelas. Decretos de gobierno. (...) Un periódico es el hombre. El ciudadano, la civilización, el cielo, la tierra, lo pasado, lo presente, los crímenes, las grandes acciones, la buena o la mala administración, las necesidades del individuo, la misión del gobierno, la historia contemporánea, la historia de todos los tiempos, el siglo presente, la humanidad en general, la medida de la civilización de un pueblo." D.F. Sarmiento, "El Zonda" Nro 4.

En Chile Sarmiento pudo iniciar una etapa más tranquila en su vida. Se casó con Benita, viuda de Don Castro y Calvo, adoptó a su hijo Dominguito y publicó su obra más importante: "Facundo, Civilización y Barbarie". Eligió el periodismo como trinchera para luchar contra Rosas, fundó dos nuevos periódicos: "La Tribuna" y "La Crónica" desde los que atacó duramente a Don Juan Manuel.

Entre 1845 y 1847, por encargo del gobierno chileno, visitó Uruguay, Brasil, Francia, España, Argelia, Italia, Alemania, Suiza, Inglaterra, EEUU, Canadá y Cuba. En cada uno de estos países se interesó por sus sistemas educativos, el nivel de la enseñanza y las comunicaciones. Todas estas impresiones las volcó en su libro "Viajes por Europa, Africa y América". A fines de 1845 conoció en Montevideo a Esteban Echeverría, uno de los fundadores de la fundación del 37 y como él, opositor a Rosas y exiliado. Estando en Francia, en 1846, tuvo un raro privilegio: conocer personalmente al General San Martín en su casa de Gran Bourg y mantener una larga entrevista con el libertador.

De regreso a Chile incrementó su actividad periodística contra Rosas, lo que motivó que el gobernador de Buenos Aires solicitara dos veces la extradición de Sarmiento para juzgarlo por calumnias, cosa a la que el gobierno chileno se negó.

Sarmiento pensaba que el gran problema de la Argentina era el atraso que él sintetizaba con la frase "civilización y la barbarie". Como muchos pensadores de su época, entendía que la civilización se identificaba con la ciudad, con lo urbano, lo que estaba en contacto con lo europeo, o sea lo que para ellos era el progreso. La barbarie, por el contrario, era el campo, lo rural, el atraso, el indio y el gaucho. Este dilema, según él, solo podía resolverse por el triunfo de la "civilización" sobre la "barbarie". Decía "Quisiéramos apartar de toda cuestión social americana a los salvajes por quienes sentimos sin poderlo remediar, una invencible repugnancia.".

En una carta le aconsejaba a Mitre: "no trate de economizar sangre de gauchos. Este es un abono que es preciso hacer útil al país. La sangre es lo único que tienen de seres humanos esos salvajes." Lamentablemente el progreso no llegó para todos y muchos "salvajes y bárbaros" pagaron con su vida o su libertad el "delito" de haber nacido indios o de ser gauchos y no tener un empleo fijo.

La obra literaria de Sarmiento estuvo marcada por su actuación política desde que escribió en 1845: "¡Sombra terrible de Facundo, voy a evocarte, para que, sacudiendo el ensangrentado polvo que cubre tus cenizas, te levantes a explicarnos la vida secreta y las convulsiones internas que desgarran las entrañas de un noble pueblo! (...) Facundo no ha muerto ¡Vive aún! ; está vivo en las tradiciones populares, en la política y las revoluciones argentinas; en Rosas, su heredero, su complemento. (...) Facundo, provinciano, bárbaro, valiente, audaz, fue reemplazado por Rosas, hijo de la culta Buenos Aires, sin serlo él, (...) tirano sin rival hoy en la tierra." Estos párrafos del "Facundo" nos muestran el estilo de Sarmiento. Facundo, a quien odia y admira a la vez, es la excusa para hablar del gaucho, del caudillo, del desierto interminable, en fin, de la Argentina de entonces, de todos los elementos que representan para él el atraso y con los que hay que terminar por las buenas o las malas.

Sarmiento desde Chile alternó su actividad periodística con la literaria y educativa. En su libro "Viajes" (1849) se reflejan mucho más que las impresiones de un viajero atento y observador; allí se ocupó de lo que lo maravilla de los países que visita y que quisiera ver en su tierra. Pone el acento en el progreso industrial, el avance de las comunicaciones y de la educación.

En su libro "Argirópolis" (1850) dedicado a Urquiza, expresó un proyecto para crear una confederación en la cuenca del Plata, compuesta por las actuales Argentina, Uruguay y Paraguay, cuya capital estaría en la Isla Martín García. El modelo de organización era la Constitución norteamericana y proponía fomentar la inmigración, la agricultura y la inversión de capitales extranjeros.

Mantuvo fuertes polémicas con políticos y escritores de su tiempo, como Juan Bautista Alberdi, con quien no coincidía en apoyar a Urquiza. Esta polémica se expresó a través de dos libros: "Cartas Quillotanas" de Sarmiento y "Complicidad de la prensa en las guerras civiles de la República Argentina" de Alberdi. Sarmiento, no se quedó tranquilo y le respondió con dos libros más: "Las Ciento y una. Epoca preconstitucional" y "Comentarios a la Constitución de la Nación Argentina".

En 1862 el General Mitre asumió la presidencia y se propuso unificar al país. En estas circunstancias asumió Sarmiento la gobernación de San Juan. A poco de asumir dictó una Ley Orgánica de Educación Pública que imponía la enseñanza primaria obligatoria y creaba escuelas para los diferentes niveles de educación, entre ellas una con capacidad para mil alumnos, el Colegio Preparatorio, más tarde llamado Colegio Nacional de San Juan, y la Escuela de Señoritas, destinada a la formación de maestras

En sólo dos años Sarmiento cambió la fisonomía de su provincia. Abrió caminos, ensanchó calles, construyó nuevos edificios públicos, hospitales, fomentó la agricultura y apoyó la fundación de empresas mineras. Y como para no aburrirse, volvió a editar el diario "El Zonda".
En 1863 se produjo en la zona el levantamiento del Chacho Peñaloza y Sarmiento decretó el Estado de Sitio y como coronel que era, asumió personalmente la guerra contra el caudillo riojano hasta derrotarlo. El ministro del interior de Mitre, Guillermo Rawson criticó la actitud de Sarmiento de decretar el estado de sitio por considerar que era una decisión exclusiva del poder ejecutivo nacional. Sarmiento, según su estilo, renunció. Corría el año 1864.

A pedido del Presidente Mitre, en 1864 viajó a los EEUU como ministro plenipotenciario de la Argentina. De paso por Perú, donde se hallaba reunido el Congreso Americano, condenó el ataque español contra Perú, a pesar de las advertencias de Mitre para que no lo hiciera.
Sarmiento llegó a Nueva York en mayo de 1865. Acababa de asumir la presidencia Andrew Johnson en reemplazo de Abraham Lincoln, asesinado por un fanático racista. Sarmiento quedó muy impresionado y escribió "Vida de Lincoln". Frecuentó los círculos académicos norteamericanos y fue distinguido con los doctorados "Honoris Causa" de las Universidades de Michigan y Brown.

Mientras Sarmiento seguía en los Estados Unidos, se aproximaban las elecciones y un grupo de políticos los postuló para la candidatura presidencial. Los comicios se realizaron en abril de 1868 y el 16 de Agosto, mientras estaba de viaje hacia Buenos Aires, el Congreso lo consagró presidente de los argentinos. Asumió el 12 de octubre de ese año.

Cuando Sarmiento asumió la presidencia todavía se combatía en el Paraguay. La guerra iba a llevarse la vida de su querido hijo Dominguito. Sarmiento ya no volvería a ser el mismo, un profundo dolor lo acompañaría hasta su muerte.

Durante su presidencia siguió impulsando la educación fundando en todo el país unas 800 escuelas y los institutos militares (Liceo Naval y Colegio Militar).

Sarmiento había aprendido en los EEUU la importancia de las comunicaciones en un país extenso como el nuestro. Durante su gobierno se tendieron 5.000 kilómetros de cables telegráficos y en 1874, poco antes de dejar la presidencia pudo inaugurar la primera línea telegráfica con Europa. Modernizó el correo y se preocupó particularmente por la extensión de las líneas férreas. Pensaba que, como en los EEUU, el tren debía ser el principal impulsor del mercado interno, uniendo a las distintas regiones entre sí y fomentando el comercio nacional. Pero estos no eran los planes de las compañías británicas inglesas, cuyo único interés era traer los productos del interior al puerto de Buenos Aires para poder exportarlos a Londres. En lugar de un modelo ferroviario en forma de telaraña, o sea interconectado, se construyó uno en forma de abanico, sin conexiones entre las regiones y dirigido al puerto. Este es un claro ejemplo de las limitaciones que tenían los gobernantes argentinos frente a las imposiciones del capital inglés. La red ferroviaria paso de 573 kilómetros a 1331 al final de su presidencia.

En 1869 se concretó el primer censo nacional. Los argentinos eran por entonces 1.836.490, de los cuales el 31% habitaba en la provincia de Buenos Aires y el 71% era analfabeto. Según el censo, el 5% eran indígenas y el 8% europeos. El 75% de las familias vivía en la pobreza, en ranchos de barro y paja. Los profesionales sólo representaban el 1% de la población. La población era escasa, estaba mal educada y como la riqueza estaba mal distribuida. Sarmiento fomentó la llegada al país de inmigrantes ingleses y de la Europa del Norte y desalentó la de los de la Europa del Sur. Pensaba que la llegada de sajones fomentaría en el país el desarrollo industrial y la cultura. En realidad los sajones preferían emigrar hacia los EEUU donde había puestos de trabajo en las industrias. La argentina de entonces era un país rural que sólo podía convocar, lógicamente a campesinos sin tierras. Y, para tristeza de Sarmiento, la mayoría de los inmigrantes, muchos de nuestros abuelos, serán campesinos italianos, españoles, rusos y franceses.

Entre las múltiples obras de Sarmiento hay que mencionar la organización de la contaduría nacional y el Boletín Oficial que permitieron a la población en general, conocer las cuentas oficiales y los actos de gobierno. Creó el primer servicio de tranvías a caballo, diseñó los Jardines Zoológico y Botánico. Al terminar su presidencia 100.000 niños cursaban la escuela primaria.
Al finalizar su mandato apoyo la candidatura del tucumano Nicolás Avellaneda.

El 22 de agosto de 1873 Sarmiento sufrió un atentado mientras se dirigía hacía la casa de Vélez Sarsfield. Cuando transitaba por la actual esquina de Corrientes y Maipú, una explosión sacudió al coche en el que viajaba. El sanjuanino no lo escuchó porque ya padecía una profunda sordera. Los autores fueron dos anarquistas italianos, los hermanos Francisco y Pedro Guerri que confesaron haber sido contratados por hombres de López Jordán. El atentado falló porque a Francisco Guerri se le reventó el trabuco en la mano. Sarmiento salió ileso del atentado y se enteró porque se lo contaron despues.

Al finalizar su mandato en 1874, Sarmiento se retiró de la presidencia pero no de la política. En 1875 asumió el cargo de Director General de Escuelas de la Provincia de Buenos Aires y continuó ejerciendo el periodismo desde "La Tribuna". Poco después fue electo senador por San Juan.
En esa época vivía con su hermana, su hija y sus nietos en la calle Cuyo, actual Sarmiento 1251.
En 1879 asumió como ministro del Interior de Avellaneda, pero por diferencias políticas con el gobernador de Buenos Aires, Carlos Tejedor, renunció al mes de haber asumido.

Durante la presidencia de Roca ejerció el cargo de Superintendente General de Escuelas del Consejo Nacional de Educación. En la época en que Sarmiento fomentaba la educación popular, el índice de analfabetos era altísimo. En el campo había muy pocas escuelas porque la mayoría de los estancieros no tenían ningún interés en que los peones y sus hijos dejaran de ser ignorantes. Cuanto menos educación tuvieran más fácil sería explotarlos.

Pero Sarmiento trataba de hacerles entender que una educación dirigida según las ideas y los valores de los sectores dominantes, lejos de poner en peligro sus intereses, los reproducía y confirmaba. "Para tener paz en la república argentina, para que los montoneros no se levanten, para que no haya vagos, es necesario educar al pueblo en la verdadera democracia, enseñarles a todos lo mismo, para que todos sean iguales... para eso necesitamos hacer de toda la república una escuela."

De todas formas le costó muchísimo convencer a los poderosos de que les convenía la educación popular y recién en 1882, logró la sanción de su viejo proyecto de Ley de educación gratuita, laica y obligatoria, que llevará el número 1420.

Una de sus últimas actuaciones públicas data de 1885. El presidente Roca prohibió a los militares emitir opiniones políticas. Sarmiento, que no podía estar sin expresar su pensamiento, decidió pedir la baja del ejército, y opinar libremente a través de las páginas de su diario "El Censor".
En el invierno de 1888 se trasladó al clima cálido del Paraguay junto a Aurelia Vélez, la hija de Dalmacio Vélez Sarsfiled, autor del Código Civil. Aurelia fue la compañera de Sarmiento durante los últimos años de su vida. Murió el 11 de septiembre de ese año, en Paraguay, como su hijo Dominguito. Pocos años antes había dejado escrito una especie de testamento político: "Nacido en la pobreza, criado en la lucha por la existencia, más que mía de mi patria, endurecido a todas las fatigas, acometiendo todo lo que creí bueno, y coronada la perseverancia con el éxito, he recorrido todo lo que hay de civilizado en la tierra y toda la escala de los honores humanos, en la modesta proporción de mi país y de mi tiempo; he sido favorecido con la estimación de muchos de los grandes hombres de la Tierra; he escrito algo bueno entre mucho indiferente; y sin fortuna que nunca codicié, porque ere bagaje pesado para la incesante pugna, espero una buena muerte corporal, pues la que me vendrá en política es la que yo esperé y no deseé mejor que dejar por herencia millones en mejores condiciones intelectuales, tranquilizado nuestro país, aseguradas las instituciones y surcado de vías férreas el territorio, como cubierto de vapores los ríos, para que todos participen del festín de la vida, de que yo gocé sólo a hurtadillas".

Año tras año toda su vida
1811 Nace en San Juan hijo de Doña Paula Albarracín y José Clemente Sarmiento
1816 Concurre a la Escuela de la Patria de Primeras Letras
1825 Se inicia como maestro junto a su tío, el cura José de Oro, en San Francisco del Monte, San Luis. Allí conocerá a María Jesús del Canto, la futura madre de su hija Emilia Faustina
1827 Regresa a san Juan y presencia la entrada de Facundo Quiroga a la provincia.
1829 Se une junto a su padre a las fuerzas unitarias dirigidas por el general José María Paz.
1831 Inicia su primer exilio en Chile. Trabaja como maestro, dependiente de tienda y minero. Nace su hija Emilia Faustina
1835 Enferma de tifus y sufre una profunda depresión. Sus amigos gestionan ante el gobernador Benavidez una autorización para el retorno a su provincia.
1836 Regresa a san Juan
1838 Crea la Sociedad Literaria de San Juan
1839 Funda el Colegio de Señoritas de la Advocación de Santa Rosa de Lima. Lanza el primer número de "El Zonda".
1840 Participa de una sublevación unitaria derrotada y debe exiliarse nuevamente en Chile
1841 Colabora en los periódicos "El Mercurio" y "El Nacional".
1842 Funda el periódico "El Progreso". Organiza en Santiago de Chile la primera escuela de preceptores de América Latina.
1843 Publica "Mi defensa"
1845 Publica "Método gradual de lectura"; "Vida de Félix Aldao" y "Facundo: Civilización y Barbarie". El 18 de Octubre parte en gira por Europa y EEUU para conocer los sistemas educativos.
1846 Durante su estadía en Francia visita al General San Martín en Grand Bourg.
1848 Se casa con Benita Martínez Pastoriza, madre de Dominguito. Su hija Faustina se casa a su vez con el tipógrafo Jules Belín. En San Juan Muere su padre y doña Paula se traslada a Chile.
1849 Publica el primer tomo de sus "Viajes" y "Educación Popular". Juan Manuel de Rosas pide al gobierno chileno la extradición de Sarmiento.
1850 Publica "Recuerdos de Provincia" y "Argirópolis", un ensayo político que propone una confederación con Uruguay y Paraguay con Capital en la Isla Martín García
1851 Regresa a la Argentina y se incorpora al Ejército Grande de Urquiza
1852 Participa en la batalla de Caseros, pero tras la caída de Rosas se distancia de Urquiza por diferencias políticas.
1853 entabla una fuerte polémica con Juan Bautista Alberdi sobre la Confederación y el modelo de país.
1855 Publica "Educación Común". Es nombrado director del periódico "El Nacional"
1856 Es designado Jefe del Dpto de escuelas de Buenos Aires. Comienza su relación con Aurelia Vélez.
1857 Es electo Senador del Estado de Bs. As.
1860 El gobernador Mitre lo designa ministro de gobierno y relaciones exteriores.
1861 Muere su madre
1862 Es electo gobernador de San Juan. Se separa de su esposa
1863 establece la enseñanza obligatoria en San Juan. Derrota y ejecuta al Chacho Peñaloza.
1864 Tras la crítica a sus métodos represivos renuncia a la gobernación y es designado ministro plenipotenciario de la Argentina en los EEUU
1865 Publica en los EEUU el periódico "Ambas Américas"
1866 Muere Dominguito en la batalla de Curupaytí, Paraguay, publica Vida de Lincoln
1867 El coronel Mansilla lanza la candidatura de Sarmiento a la presidencia de la república
1868 Es electo presidente de la república
1870 Visita a Urquiza en Entre Ríos. Poco después el caudillo entrerriano será asesinado acusado de traidor.
1871 Debe enfrentar la epidemia de Fiebre Amarilla que causa 14.000 muertos
1872 Crea el banco Nacional, funda la Escuela naval y la Academia de Ciencias de Córdoba
1874 Proyecta el Parque 3 de Febrero en los terrenos de la que fue la casa de Rosas en Palermo. Apoya la candidatura presidencial de Nicolás Avellaneda.
1877 es ascendido a General de Brigada
1879 Avellaneda lo nombra ministro del Interior en octubre abandona el cargo y acepta la candidatura a presidente ofrecida por la Unión Nacional
1881 es desganado superintendente de Escuelas del Consejo Nacional de Educación
1882 Participa activamente en la redacción y aprobación de la Ley 1420 de Educación Común
1885 funda el diario El Censor, el último de sus periódicos.
1886 Publica "Vida de Dominguito". Acepta la candidatura a diputado por San Juan, es derrotado por fraude
1887 Se traslada a Paraguay buscando un mejor clima para su salud
1888 Se radica en Asunción junto a su hija y su nieta María Luisa. El 6 de septiembre sufre un ataque al corazón. A las dos y cuarto de la mañana del 11 de septiembre muere.

Fuente: www.elhistoriador.com.ar
Compartir lo provisorio, de Mamerto Menapace, publicado en La sal de la tierra, Editorial Patria Grande

Allá en las chacras se vivía prácticamente a la intemperie. No nos defendíamos demasiado de las realidades ni del clima. Más bien compartíamos el ritmo de las cosas; y por supuesto de las personas.

La noche nos encerraba a todos en los pequeños charcos de luz que creaban nuestras lámparas. Los mismo que las aves acuáticas se reúnen en sus charcos cuando las atropella la sequía. La lluvia también era compartida por todos; para todos era un tiempo de recogimiento bajo techo dejando suceder lo que era imposible conjurar. También se vivía compartiendo los mismos gestos de la primavera, y las mismas humillaciones del verano o del invierno.

Porque cuando se vive a la intemperie uno no puede hacer provisión de clima. Se vive el clima del momento con intensidad y compartiéndolo, sin reservarse de él nada para el día siguiente. Tal vez lo único que se guardaba de un acontecimiento, bueno o malo, era el recuerdo de haberlo compartido y la capacidad de evocarlo en futuros reencuentros.

Y lo que sucedía con los acontecimientos, sucedía también con los alimentos. Sobre todo con aquellos más primitivos, que provenían de la caza y de la pesca. Porque en las chacras abundaban las palomas, sobre todo cuando el lino era chiquito, o luego de la desgranada del maíz, o para cuando el girasol empezaba a madurar. Casi siempre cuando se escopeteaba la bandada, solían caer más palomas de las que nosotros podíamos aprovechar. Y como no teníamos la posibilidad de conservarlas, y además era un orgullo el haber tenido buen puntería el resto se mandaba a los vecinos. Y allá íbamos los chicos, hacia distintos rumbos, llevando cada uno un par de palomas gordas, con la esperanza de recibir propina. Y volvíamos luego a nuestro territorio con el orgullo de todo embajador.

Los lunes la embajada venía del arroyo. Sábado y domingo, Don Pablo los pasaba en la isla o en el monte. Su razón de compartir era mucho más urgente, porque el pescado de los arroyos del norte hay que comerlo fresco. A veces, en lugar del par de pescados chicos sacados a línea y anzuelo, solía venir con n trozo de pescado de los grandes, de esos que traen acollarado el relato de la hazaña. Y si la embajada no venía, todos compartíamos en silencio el fracaso vivido ese fin de semana por Don Pablo.

Lo mismo sucedía cuando para el invierno se carneaba el chancho. En eso del dar y el recibir, todos los vecinos comíamos presas frescas de las sucesivas carneadas. Y todos participábamos del esfuerzo o de la habilidad de todos. Sentíamos como una especie de alegría de familia grande que nos hacía compartir penas, alegrías, trabajos y fracasos.

Ahora todo aquello ha cambiado. Casi todos han comprado una heladera. En cada chacra se dispone de una pequeña geografía polar que permite conservar los alimentos perecederos. Lo que antes se compartía, ahora se conserva. Y así Don Pablo se condenó en los últimos años de vida a comer siempre pescado: fresco los lunes, semifresco los martes, y partir del miércoles, pescado conservado. (Lo que no dejaba de encerrar un peligro.) Y ya nadie supo nada de sus éxitos y de sus fracasos. Lo que hizo que para él mismo la pesca perdiera mucho de su encanto. Y también para nosotros en eso de cazar palomas.

Desde que hemos optado por la heladera, nuestra alimentación y nuestra vida en las chacras ha perdido mucho de su variedad, de su capacidad de sorpresa, de ese sentimiento de totalidad que creaba el compartir. Nos defendemos mejor contra el clima y la intemperie, sí.
Pero nos estamos volviendo menos hombres.

lunes, octubre 24, 2005

Los hijos del divorcio: Un nuevo estudio explora sus efectos negativos

CHICAGO, 22 de octubre de 2005 (ZENIT.org).- Una cuarta parte de los adultos norteamericanos entre 18 y 35 años han crecido en familias divorciadas. El impacto del divorcio en ellos es el hilo conductor de un nuevo libro, «Between Two Worlds: The Inner Lives of Children of Divorce» (Entre dos Mundos: las Vidas Íntimas de los Hijos del Divorcio) (Crown Publishers).

La autora, Elizabeth Marquardt, entrevistó a 1.500 adultos jóvenes tanto de familias divorciadas como de familias intactas, y llevó a cabo entrevistas en profundidad con más de 70 de ellos. Su conclusión: «Aunque el divorcio es en ocasiones necesario, no existe ninguno que pueda ser calificado como un buen divorcio».

Marquardt reconoce que los hijos en los matrimonios con grandes conflictos, o en situaciones donde hay violencia, se benefician con el divorcio. Tales casos, sin embargo, implican sólo a un tercio de los divorcios, y los hijos de los matrimonios con conflictos de baja intensidad acaban peor tras el divorcio. Y, aunque hace notar que la mayoría de los padres se toma en serio la decisión de divorciarse, Marquardt les anima a intentar preservar, incluso con más insistencia, sus matrimonios, dado el coste que implica para sus hijos.

Incluso si un divorcio es amistoso, y la pareja mantiene una buena relación tras la separación, e incluso aunque sigan queriendo y cuidando a sus hijos, esto no elimina «la reestructuración radical del universo del niño», sostiene la autora.

El momento en el que los padres se separan es sólo el comienzo de la reestructuración. Cerca de dos tercios de los hijos del divorcio entrevistados por Marquardt dicen que sintieron que crecían en dos familias, en vez de en una. Crecer en dos mundos crea toda una serie de problemas, comenzando por el hecho de que ambos padres ya no son «residentes», o una parte de la familia.

Mundos paralelos

En el matrimonio, explica Marquardt, los padres suelen tener sus diferencias, pero trabajan juntos por superarlas y tratan de dar a la vida familia una unidad. Pero un divorcio suele empujar a los ex cónyuges a definirse a sí mismos en oposición al otro. De ahí que las creencias y valores de los dos padres, en lugar de lograr un equilibrio, existan en paralelo, creando para los hijos contrastes y conflictos, en vez de unidad.

Tras la ruptura, el conflicto entre los ex cónyuges puede quedar ya cerrado, pero el conflicto entre los dos mundos es todavía muy vivo, observa Marquardt. En contraste, un hijo en una familia unida no tiene que pasar mucho tiempo ni esforzarse en reconciliar las diferencias entre los dos padres, y puede concentrarse en gozar de su vida diaria.

De esta forma, los hijos de las parejas divorciadas se ven forzados a entrar en un mundo adulto de responsabilidades y preocupaciones a una edad muy temprana. Las entrevistas de Marquardt han revelado que, incluso entre aquellos niños cuyos padres han llevado bien su divorcio (en términos de reducir el impacto en sus hijos), cerca de la mitad coincidieron en que se sintieron siempre como adultos, incluso aunque fueran muy jóvenes. Esta proporción alcanza los dos tercios entre los hijos cuyos padres tuvieron divorcios más problemáticos.

Tras el divorcio, muchos de los niños sintieron que tenían la responsabilidad de proteger a sus madres, y un sustancial número de ellos tuvo que asumir mayores deberes a la hora de cuidar a sus hermanos. Esto también ocurre en las familias en las que un progenitor muere o está gravemente enfermo; la diferencia con el divorcio estriba en que los hijos saben que esto ocurre como resultado de una elección voluntaria por parte de al menos uno de los progenitores.

La forma en que tiene lugar el divorcio también suele herir a los hijos, cuenta Marquardt. En una situación ideal, los padres reunirían a los hijos y explicarían cuidadosamente cada cosa, y los tranquilizarían sobre el futuro. Sin embargo, la ruptura de un matrimonio suele ser confusa y caótica, haciendo difícil que los padres organicen bien el anuncio inicial a sus hijos, informa la autora.

Además, los adultos suelen ser vulnerables y estar apenados o bajo shock. Puede ser duro para los hijos ver a sus padres en esta situación. Y esto también significa que, precisamente cuando los hijos tienen necesidad de ser reconfortados, es cuando menos pueden volverse a sus padres buscando apoyo.

Surgen otros problemas en el periodo tras el divorcio, cuando los hijos tienen que enfrentarse a los conflictos y críticas entre los ex-cónyuges. Los adultos jóvenes que crecieron en familias divorciadas le confesaron a Marquardt cómo se sentían obligados a ser cuidadosos con lo que decían a cada progenitor respecto del otro. Dicha información podía conducir a lastimar sentimientos o cosechar críticas sobre el otro progenitor.

Forjar valores

El libro de Marquardt se centra en el impacto del divorcio en las vidas morales de los hijos. Los hijos sienten un conflicto cuando experimentan valores y modos de vida diferentes en cada uno de los hogares de los progenitores separados. El resultado es que los hijos han de forjar sus propios valores y creencias, sostiene la autora.

Normalmente, los hijos absorben los valores de sus padres en un proceso natural y gradual, sin tener que hacer un esfuerzo consciente. Es cierto que suele haber diferencias entre los padres, pero en conjunto los hijos ven a los valores de sus padres como complementarios. Y los padres normalmente trabajan unidos, respaldándose su autoridad el uno al otro.

Sin embargo, los jóvenes adultos estudiados por Marquardt raramente pensaron en los valores de sus padres como en algo unificado. Las diferencias en asuntos pequeños como las rutinas del hogar o las normas de disciplina, o en temas más importantes como los valores morales y las ambiciones para sus hijos, se separaron más aún tras el divorcio. Esto lleva a que los hijos se sientan confundidos, y se enfrenten a la tarea de construir sus propios valores en medio de este conflicto.

Las diferencias entre los dos hogares van mucho más allá de una situación social incómoda, donde no deseamos ofender a nadie, comenta Marquardt. Los conflictos se dan entre las dos personas más importantes para la vida de un niño – y estas señales cruzadas se dirigen a la esencia de la identidad del niño.

Una consecuencia es que, de los hijos entrevistados, el 24% de los procedentes de familias divorciadas dicen que no comparten los mismos valores morales que sus padres. Y el 17% sintieron lo mismo de sus madres. Esto se puede comparar con los hijos de las familias intactas, donde sólo el 6% dicen que no comparten los mismos valores que sus padres.

Al preguntarles de quién adquirieron el sentido de lo correcto e incorrecto, los hijos de divorciados nombraban a las madres, y rara vez a los padres. Al exigírseles a estos niños que forjaran sus propios valores, concluye Marquardt, se explica por qué tienen índices más altos de problemas como el consumo de sustancias, embarazos adolescentes y delincuencia.

Otro descubrimiento del estudio es que los jóvenes adultos de hoy que fueron hijos de divorciados son menos religiosos en general de lo que lo son los provenientes de familias intactas. En ocasiones, el sufrimiento causado por el divorcio de sus padres les llevó a cuestionar su fe en Dios. Otros intentan motivarse buscando respuestas a sus dudas en la fe religiosa, pero el proceso puede convertirse en una lucha.

En general, los adultos jóvenes de familias divorciadas son menos propensos a ser religiosos o a practicar su fe que aquellos provenientes de familias intactas. Son también más propensos a dudar de la sinceridad de la fe sus padres.

Marquardt concluye observando que los hijos requieren matrimonios fuertes y duraderos para tener el hogar seguro que necesitan para crecer. No son como una propiedad que se pueda dividir, sino que necesitan amor, estabilidad y guía moral. Esto significa que hay que cambiar nuestra forma de pensar sobre el matrimonio. Los progenitores, abogaba ella, no sólo deben amar a sus hijos, sino también deben amarse y perdonarse el uno al otro, para mantener una familia que dure toda la vida.
ZSI05102201

domingo, octubre 23, 2005

Los hijos del divorcio:Un nuevo estudio explora sus efectos negativos

CHICAGO, 22 de octubre de 2005 (ZENIT.org).- Una cuarta parte de los adultos norteamericanos entre 18 y 35 años han crecido en familias divorciadas. El impacto del divorcio en ellos es el hilo conductor de un nuevo libro, «Between Two Worlds: The Inner Lives of Children of Divorce» (Entre dos Mundos: las Vidas Íntimas de los Hijos del Divorcio) (Crown Publishers).

La autora, Elizabeth Marquardt, entrevistó a 1.500 adultos jóvenes tanto de familias divorciadas como de familias intactas, y llevó a cabo entrevistas en profundidad con más de 70 de ellos. Su conclusión: «Aunque el divorcio es en ocasiones necesario, no existe ninguno que pueda ser calificado como un buen divorcio».

Marquardt reconoce que los hijos en los matrimonios con grandes conflictos, o en situaciones donde hay violencia, se benefician con el divorcio. Tales casos, sin embargo, implican sólo a un tercio de los divorcios, y los hijos de los matrimonios con conflictos de baja intensidad acaban peor tras el divorcio. Y, aunque hace notar que la mayoría de los padres se toma en serio la decisión de divorciarse, Marquardt les anima a intentar preservar, incluso con más insistencia, sus matrimonios, dado el coste que implica para sus hijos.

Incluso si un divorcio es amistoso, y la pareja mantiene una buena relación tras la separación, e incluso aunque sigan queriendo y cuidando a sus hijos, esto no elimina «la reestructuración radical del universo del niño», sostiene la autora.

El momento en el que los padres se separan es sólo el comienzo de la reestructuración. Cerca de dos tercios de los hijos del divorcio entrevistados por Marquardt dicen que sintieron que crecían en dos familias, en vez de en una. Crecer en dos mundos crea toda una serie de problemas, comenzando por el hecho de que ambos padres ya no son «residentes», o una parte de la familia.

Mundos paralelos

En el matrimonio, explica Marquardt, los padres suelen tener sus diferencias, pero trabajan juntos por superarlas y tratan de dar a la vida familia una unidad. Pero un divorcio suele empujar a los ex cónyuges a definirse a sí mismos en oposición al otro. De ahí que las creencias y valores de los dos padres, en lugar de lograr un equilibrio, existan en paralelo, creando para los hijos contrastes y conflictos, en vez de unidad.

Tras la ruptura, el conflicto entre los ex cónyuges puede quedar ya cerrado, pero el conflicto entre los dos mundos es todavía muy vivo, observa Marquardt. En contraste, un hijo en una familia unida no tiene que pasar mucho tiempo ni esforzarse en reconciliar las diferencias entre los dos padres, y puede concentrarse en gozar de su vida diaria.

De esta forma, los hijos de las parejas divorciadas se ven forzados a entrar en un mundo adulto de responsabilidades y preocupaciones a una edad muy temprana. Las entrevistas de Marquardt han revelado que, incluso entre aquellos niños cuyos padres han llevado bien su divorcio (en términos de reducir el impacto en sus hijos), cerca de la mitad coincidieron en que se sintieron siempre como adultos, incluso aunque fueran muy jóvenes. Esta proporción alcanza los dos tercios entre los hijos cuyos padres tuvieron divorcios más problemáticos.

Tras el divorcio, muchos de los niños sintieron que tenían la responsabilidad de proteger a sus madres, y un sustancial número de ellos tuvo que asumir mayores deberes a la hora de cuidar a sus hermanos. Esto también ocurre en las familias en las que un progenitor muere o está gravemente enfermo; la diferencia con el divorcio estriba en que los hijos saben que esto ocurre como resultado de una elección voluntaria por parte de al menos uno de los progenitores.

La forma en que tiene lugar el divorcio también suele herir a los hijos, cuenta Marquardt. En una situación ideal, los padres reunirían a los hijos y explicarían cuidadosamente cada cosa, y los tranquilizarían sobre el futuro. Sin embargo, la ruptura de un matrimonio suele ser confusa y caótica, haciendo difícil que los padres organicen bien el anuncio inicial a sus hijos, informa la autora.

Además, los adultos suelen ser vulnerables y estar apenados o bajo shock. Puede ser duro para los hijos ver a sus padres en esta situación. Y esto también significa que, precisamente cuando los hijos tienen necesidad de ser reconfortados, es cuando menos pueden volverse a sus padres buscando apoyo.

Surgen otros problemas en el periodo tras el divorcio, cuando los hijos tienen que enfrentarse a los conflictos y críticas entre los ex-cónyuges. Los adultos jóvenes que crecieron en familias divorciadas le confesaron a Marquardt cómo se sentían obligados a ser cuidadosos con lo que decían a cada progenitor respecto del otro. Dicha información podía conducir a lastimar sentimientos o cosechar críticas sobre el otro progenitor.

Forjar valores

El libro de Marquardt se centra en el impacto del divorcio en las vidas morales de los hijos. Los hijos sienten un conflicto cuando experimentan valores y modos de vida diferentes en cada uno de los hogares de los progenitores separados. El resultado es que los hijos han de forjar sus propios valores y creencias, sostiene la autora.

Normalmente, los hijos absorben los valores de sus padres en un proceso natural y gradual, sin tener que hacer un esfuerzo consciente. Es cierto que suele haber diferencias entre los padres, pero en conjunto los hijos ven a los valores de sus padres como complementarios. Y los padres normalmente trabajan unidos, respaldándose su autoridad el uno al otro.

Sin embargo, los jóvenes adultos estudiados por Marquardt raramente pensaron en los valores de sus padres como en algo unificado. Las diferencias en asuntos pequeños como las rutinas del hogar o las normas de disciplina, o en temas más importantes como los valores morales y las ambiciones para sus hijos, se separaron más aún tras el divorcio. Esto lleva a que los hijos se sientan confundidos, y se enfrenten a la tarea de construir sus propios valores en medio de este conflicto.

Las diferencias entre los dos hogares van mucho más allá de una situación social incómoda, donde no deseamos ofender a nadie, comenta Marquardt. Los conflictos se dan entre las dos personas más importantes para la vida de un niño – y estas señales cruzadas se dirigen a la esencia de la identidad del niño.

Una consecuencia es que, de los hijos entrevistados, el 24% de los procedentes de familias divorciadas dicen que no comparten los mismos valores morales que sus padres. Y el 17% sintieron lo mismo de sus madres. Esto se puede comparar con los hijos de las familias intactas, donde sólo el 6% dicen que no comparten los mismos valores que sus padres.

Al preguntarles de quién adquirieron el sentido de lo correcto e incorrecto, los hijos de divorciados nombraban a las madres, y rara vez a los padres. Al exigírseles a estos niños que forjaran sus propios valores, concluye Marquardt, se explica por qué tienen índices más altos de problemas como el consumo de sustancias, embarazos adolescentes y delincuencia.

Otro descubrimiento del estudio es que los jóvenes adultos de hoy que fueron hijos de divorciados son menos religiosos en general de lo que lo son los provenientes de familias intactas. En ocasiones, el sufrimiento causado por el divorcio de sus padres les llevó a cuestionar su fe en Dios. Otros intentan motivarse buscando respuestas a sus dudas en la fe religiosa, pero el proceso puede convertirse en una lucha.

En general, los adultos jóvenes de familias divorciadas son menos propensos a ser religiosos o a practicar su fe que aquellos provenientes de familias intactas. Son también más propensos a dudar de la sinceridad de la fe sus padres.

Marquardt concluye observando que los hijos requieren matrimonios fuertes y duraderos para tener el hogar seguro que necesitan para crecer. No son como una propiedad que se pueda dividir, sino que necesitan amor, estabilidad y guía moral. Esto significa que hay que cambiar nuestra forma de pensar sobre el matrimonio. Los progenitores, abogaba ella, no sólo deben amar a sus hijos, sino también deben amarse y perdonarse el uno al otro, para mantener una familia que dure toda la vida.
ZSI05102201
ORACIÓN PARA MIS AMIGAS Esta oraciòn la escribió una monja que vivió en el siglo XVII. Es tan real y tan actual la petición.

Señor, tú sabes mejor que yo, que estoy envejeciendo y un día seré más vieja.No permitas que me haga charlatana y sobretodo que no adquiera el hábito de creer que tengo que decir algo sobre cualquier tema, en cada ocasión.

Libérame de las ansias de querer arreglar la vida de los demás. Que sea pensativa pero no taciturna; solícita pero no mandona. Con el vasto acopio de sabiduría que poseo, parece una lástima no usarla toda, pero,Tú sabes, Señor, que quiero que me queden algunos amigos al final...

Mantén mi mente libre de la recitación de infinitos detalles del pasado. Dame las alas para ir derecho al grano. Sella mis labios para que no hable de mis achaques y dolores... Ellos van en aumento con el pasar de los años, como también mi gusto por recitarlos... Pido la gracia de poder escuchar con paciencia el relato de los males ajenos.

Enséñame la gloriosa lección de que, a veces, es posible que esté equivocada... Mantén en mí una razonable dulzura.No quiero ser santa... es difícil convivir con algunas de ellas; pero una vieja amargada es una de las obras supremas del diablo.

Ayúdame a extraer de la vida toda la diversión posible. Nos rodean tantas cosas divertidas, que no quiero perderme ninguna. AMEN.-